miércoles, 19 de febrero de 2020

La mujer que soy y la que no.

Yo no soy de esas mujeres que visten de seda,
ni soy la que se cubre con pieles;
no soy esa mujer que se adorna con joyas para deslumbrar
ni la que lleva tacones de aguja para parecer más alta.

Nada de eso necesito para ser yo misma.
Me basta con la sencillez de sentirme bien
sin necesidad de aparentar nada,
con adornos fuera de lo común
con los que no me identifico...

Para estar en paz con mi interior 
no tengo que ser lo que no soy.
Nada de vestidos caros ni ropa de etiqueta
con intención de ir a la última moda,
ataviada de lujos que no van conmigo..

En vez de esto, prefiero ir normal,
sencilla y cómoda , aunque nadie se fije en mí.
Únicamente cuando escribo
me permito vestirme de hada
y tocar con mi varita invisible
las palabras que quiero hacer brillar
a mi alrededor.

Es entonces cuando me siento princesa
con mil historias que contar y sentimientos
que compartir.
Una princesa sin corona, sin traje de fiesta
ni zapatos de cristal…
Simplemente una princesa surgida
de un mundo de fantasía que no existe
más que en mis pensamientos 
y en mis palabras, 
a los que doy
rienda suelta y permito existir plenamente...


miércoles, 12 de febrero de 2020

Almas...



   Desde el principio entregó todo:
   Su corazón, sus pensamientos, sus vivencias.
   Un amor intenso, el que siempre soñó encontrar.
  
   Se deshizo en abrazos, besos, caricias....
   Y se las dedicó por completo.
   Compartió miedos, sueños, ilusiones.
   Regaló su ser entero, sin importarle nada más
   que eso.

   Pero es bien sabido que quien ofrece su vida
   desea ( lo exprese con palabras o no )
   recibir un pedacito para sí mismo.

   Detalles, aparentemente sin importancia,
   esos que solamente se ofrecen con el alma
   pero que alimentan y nutren ese jardín del cariño,
   los que se esperan cada día, sin necesidad
   de una fecha especial.
   Lo que no se pide, aunque se sueña a cada instante.
 
    Así que le quedaba la espera ilusionada y las mismas mariposas,
   esas que eran impulsadas desde mucho tiempo atrás.
   Porque el amor seguía siendo el mismo dentro de su ser.
   La emoción, a ratos escondida, nunca desaparecería...
   
   ¡ Cuántas palabras deseaba escuchar,
   cosas bonitas, nacidas del interior !
   Recibir alegrías de las manos tan amadas...
   Llenar su espíritu de la magia de sentir
   que la otra persona la amaba del mismo modo.



miércoles, 5 de febrero de 2020

UNA TARDE ESPECIAL



     Tarde de febrero.
     Niebla y frío en el exterior.
     Calor dentro del aula.
     Compañeros y amigos aprendiendo
     con ilusión.
     La profesora, amiga entregada,
     regala lecciones envueltas en
     sentimientos y entrega.
     

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